La Cheflera (Schefflera Arboricola) es una de esas plantas de salón que no se pueden pasar por alto por su gran valor decorativo y su facilidad de cuidado, accesible a cualquier amante de las plantas, independientemente de la cantidad de tiempo. Si quieres una cheflera llamativa para animar tu casa, sólo tienes que leer el artículo de AmoMiPlanta, en el que te contamos todo lo que necesitas saber sobre los cuidados de la cheflera.
Características de la planta cheflera
Su nombre científico es Schefflera Arboricola, aunque se conoce comúnmente como cheflera. Es una planta tropical, originaria de Australia. Se distingue por su gran número de hojas brillantes y muy decorativas, que pueden ser totalmente verdes o sombreadas según la variedad.
Con los cuidados adecuados, la planta puede alcanzar una altura de más de 2 metros, pero no hay que preocuparse por ello, ya que en casa tendrá un tamaño mucho más controlado en una maceta. También existe una variedad llamada Cheflera yanini o mini, que es mucho más pequeña que sus parientes.
Otra característica de esta planta que la hace especial para el hogar es su capacidad de actuar como un filtro de aire natural, purificando el aire del hogar de elementos nocivos, y es una de las plantas purificadoras recomendadas por la NASA.
Ubicación de la planta de Cheflera
Como ocurre con muchas plantas tropicales, la ubicación de la planta cheflera es crucial. Hay dos posibles ubicaciones para una planta cheflera:
En climas templados y fríos: se cultiva siempre como planta de interior.
En climas más cálidos o tropicales: La Cheflera puede cultivarse en el exterior.
Esta planta necesita mucha luz natural, y si no hay suficiente, se lo hará saber dejando caer sus hojas. Debe encontrar un lugar en la casa con la mayor cantidad de luz posible porque, a diferencia de la mayoría de las plantas tropicales, la cheflera puede tolerar la luz solar directa sin problemas, especialmente en invierno. Si tu cheflera está perdiendo muchas hojas, significa que necesita más luz.
En cuanto a la temperatura, lo mejor es mantenerla a unos 21°C durante todo el año, aunque puede prosperar entre 15°C y 25°C sin problemas. Sin embargo, hay que proteger la planta de las corrientes de aire, tanto en el interior como en el exterior, ya que éstas pueden secarla rápidamente.
Riego y humedad para las plantas cheflera
El riego y la humedad son otros puntos clave en el cultivo de esta planta, a los que hay que prestar atención porque estas necesidades pueden parecer contradictorias: la cheflera no tolera el agua estancada ni el riego excesivo, pero necesita una cierta humedad constante.
¿Cómo lograr estos objetivos al mismo tiempo? Basta con regar las plantas con muy poca frecuencia, ya que la falta de agua les hará mucho menos daño que el exceso. Antes de regar, comprueba que la tierra se ha secado más allá de la capa superior introduciendo el dedo o un palito en ella y viendo si la tierra se pega (si lo hace, es que aún está húmeda).
Además, puedes rociar las hojas con agua una vez al día, especialmente si tu casa tiene un clima muy seco debido a la calefacción o el aire acondicionado. Mantenga siempre la planta alejada de estas fuentes de calor o aire. También puedes colocar la maceta sobre un plato o bandeja con guijarros o piedras gruesas y una pulgada de agua, de modo que la base de la maceta quede por encima del agua. De este modo, el agua se evapora y proporciona de forma natural a la planta la humedad que necesita.